Hoy en día las noticias se anuncian primero vía Twitter.Por si se la perdieron,acó va la que di hoy:
¿Cómo llegamos a este punto? Pues resulta que como ya había mencionado en 2 o 3 ocasiones por acó,mi piel siempre ha sido en extremo delicada.Nunca me he llevado bien con la luz solar directa,ni con los perfumes.Ambos me sacan ronchitas,y me resecan la piel de manera excesiva,al punto de que se me escama y se me cae (eso último también me ocurre cuando ando bajo mucho stress,pero entre las técnicas zen y lo cínico,pues no es tan frecuente).Como a todo se acostumbra uno,pues total,aprendí a vivir utilizando únicamente jabón neutro,mangas largas y bloqueadores solares en invierno y primavera,que es cuando el sol se pone más rudo por acó.Hasta aquí todo relativamente bien y digamos normal para mis standares.
Como recordarán,hace unas semanas
me hicieron una biopsia.Y ahí fue donde resultó que las ronchas de alergia,en realidad siempre fueron tumores,y la supuesta piel escamada,eran placas de glóbulos blancos creciendo fuera del cuerpo.Ésto vino a explicar también
las manchas que me salieron en la cara semanas atrás cuando aumentó la radiación ultravioleta.
Aún está por determinarse el tipo preciso de cáncer que traigo...a partir de una de las muestras de mi pellejo que me quitaron,están haciendo un cultivo,y ya de ahí se verá si me canalizan a una clínica especializada,y terminar de ver qué terapia o tratamiento me corresponde.Y es que a fin de cuentas,igual me queda también la alergia a los perfumes.
Las buenas noticias,son que el cáncer de piel muy raras veces es letal.Lamentablemente,y en particular en mi caso que estuvo tantos años en plan crónico sin atención apropiada (recordemos:siempre fue tratado como alergia),no es curable,sino controlable a lo sumo.El doctor a cargo me comparó la situación con la de un diabético:nada impide continuar una vida normal,pero es necesario un cuidado diario constante.De mientras,a lo que tengo que irme habituando es a bañarme con agua fría por que el calor alimenta a los tumores.Ya estaré ahorrando en gas,supongo.
También debo ser más estricto al cuidarme de la luz solar.De entrada eso significa que tendré que habituarme a usar sombrero o gorra toda vez que salga al exterior.Ésto último me va a costar trabajo:mi guardarropa usual no combina con accesorios de esos,y si ya de por sí me decían que tengo cara de sicario del cártel de Sinaloa,con sombrero vaquero o gorra de camionero,tantito peor.También me temo que eso me va a acelerar la caída del cabello,pero bueh,ya ni modo.
Por supuesto,la mejor prevención siempre es la abstinencia,así que debo reducir mis salidas al exterior al mínimo.Eso me duele,dado mi hábito de vagar por las calles y respirar el smog,y la necesidad de ir a cachar clientes.Sin olvidar tampoco el detalle de que no sé cocinar ni un buche de agua hervida para hacer té,y por ende me he convertido en sostén de la industria restaurantera local.Al menos la acampada de la navidad pasada fue lo bastante memorable también,si es que acaso es la última que tendré.
Con todo lo anterior,es curioso notar que después de todo,nunca podré irme a vivir a una cabaña de troncos —salvo que sea en Alaska o un lugar de esos donde la noche se mide en meses.De todas formas,ya es prioritario también que procure mudarme a un lugar donde el clima sea más civilizado,o que al menos no tenga otoños e inviernos tan veraniegos como acó.Pero eso estará por verse también,que entre consultas y estudios,mis ahorros han sufrido una zancadilla gandalla...y aún viene la terapia o tratamiento final que me den en la clínica especializada.Mi tragedia se resume a que soy demasiado rico para clínica gratuita del gobierno,y demasiado pobre para hospital privado.Bueh,ya será una bronca que estaré confrontando llegado su momento,no antes ni después.
¿Mi ánimo? En lo general,estoy bien.Vale,que le diagnostiquen a uno cáncer no es precisamente causa de regocijo y siempre impacta,pero igual ya me había hecho a la idea de vivir eludiendo al sol directo.Ahora debo eludirlo más,eso será todo (espero).Por otra parte,me niego a asumir el rol de mártir que espera derrotar al cáncer y cursilería por el estilo.No desmerezco a esas historias propias del Reader's Digest y los documentales ocasionales de la TV,pero no es mi estilo dejar que mis achaques sean quienes definan lo que soy —y sé bien que no soy una víctima.Simplemente no quiero darle mayor importancia al cáncer que la de un contratiempo en mis planes de vida...aunque claro,muy seguramente a falta de mejores temas,igual ya también estaré hablando de cómo me va con los medicamentos,terapias,y mi fobia a las clínicas (de alguna forma tendría que superarla,quizá).
Habrá que poner en práctica lo que aconsejaba el hit de los Paralamas Do Sucesso:«el arte de vivir con fe sin saber con fe en qué»
Bueh,eso es todo por ahora.
Cambio y fuera.